La industria española, en pequeñas fábricas con mucha mano de obra, parece que ni pintada para este tipo de robots. Así que sin más preámbulos, permítanme presentarles a Baxter.
Baxter es el primer robot creado por la empresa Rethink Robotics, de Massachusetts, cuyo fundador, presidente del consejo e ingeniero jefe es Rodney Brooks y entre cuyos accionistas se encuentra Bezos Expeditions.
Baxter o el nuevo robot industrial
La empresa ha estado trabajando en máximo secreto durante 5 años (2008 al 2012) para producir este robot, que pese a sus fotografías que animan a mimarlo, es un robot industrial, pensado para trabajar en mitad de una fábrica. Eso es lo importante: en mitad de una fábrica.Rodney Brooks es uno de los más importantes robotocistas que han existido. Australiano, catedrático en MIT (hasta 2008) y director del laboratorio de inteligencia artificial en MIT, desde pronto produjo ideas contraintuitivas pero que han funcionado. Es una especie de Steve Jobs del mundo de los robots, con un altísimo pedigrí académico. Genghis, un robot insecto de 6 patas que le hizo famoso y ahora vive en el Smithsonian se caracterizaba por la simplicidad. Esta característica parece que impregna, en lo posible, todos sus robots.
En 1990 junto a dos de sus estudiantes, Colin Angle (que sigue) y Helen Greiner funda iRobot, la empresa que nos ha traído Roomba, el robot que te limpia la casa. iRobot en general se dedicó a sacar el conocimiento académico sobre robots de las universidades, en este caso MIT, para producir productos útiles que la sociedad usara, a empezar a desarrollar ese mundo futurista que siempre se vio en las películas de ciencia ficción.
Aquellos con dinero para comprar los productos de iRobot fueron en un principio las fuerzas armadas estadounidenses y alguna que otra gran empresa. En el 2002 introdujeron Roomba, una pequeña aspiradora con pretensiones de robot (bueno, yo en el 2003 me compré una y eso es lo que me pareció). Pero lo cierto es que todavía se siguen fabricando y ayudan muchísimo a personas con insuficiencias físicas que viven en casa solas. La idea de Roomba fue la de fabricar el primer robot que fuera útil no sólo para las grandes empresas y militares, sino para todo el mundo, a un precio asequible; la idea de democratizar el uso de robots.
La idea de Baxter es esa misma, la democratización del robot de uso industrial, que ya no fuera un monstruo separado y peligroso al servicio único de las grandes compañías sino un robot asequible (unos 20,000 euros) que pueda ser utilizado en mitad de una fábrica sin mayor problema ni peligro para los humanos, más un C-3PO (el robot de protocolo de la Guerra de Las Galaxias). La idea se le ocurrió al Sr. Brooks mientras visitaba las fábricas chinas que producían sus Roombas, dándose cuenta que una vez China empezase a desarrollarse el aumento de costes de los salarios la harían menos competitiva y la industria volvería, al menos en parte, a los países desarrollados. No podía prever que el aumento del precio del petróleo, en buena medida por el tirón chino, ayudaría aún más en este sentido.
Así nació la idea de un robot simple (al menos al principio esa era la idea) que pudiera estar en una fábrica trabajando codo con codo con los operarios, realizando la tareas tediosas que a nosotros los humanos nos aburren tanto y somos tan malos realizando, mientras el trabajador humano hace las tareas más complejas. De esta forma se ahorra, lo que permite competir con China. Aunque esta crisis ha traído una bajada de los costes laborales en España permitiendo la mejora en las exportaciones, a medio plazo esta tendencia cambiará, por lo cual sería bueno irse preparando tecnológicamente para el futuro.
Características
- Seguro. La característica principal de los nuevos robots industriales es que pueden estar en planta sin miedo a accidentes. Para ello este robot mide en cada momento la fuerza que tiene que aplicar para realizar su trabajo; si viese que tiene que aplicar más fuerza es que ha chocado con algo (una persona quizás) y para instantáneamente, teniendo además unos amortiguadores para frenar el golpe.
- Barato. Hasta cierto punto es muy barato: 20,000 euros; la competencia está en al menos 5 veces el coste. Para lograr este coste el robot se sirve de software para aliviar los problemas de hardware. La idea es no tener que utilizar los componentes más precisos y caros (motores, actuadores, cambios), sino otros más razonables, pero que pueden dar ocasión a irregularidades. Estas irregularidades se corrigen con software.
- Fácil de programar. Los robots industriales se programan con una lista de comandos que indican en cada momento que tienen que hacer cada una de las partes: un rollo para ser programado por profesionales, lo que implica mayores costes que mejor se distribuyen entre muchos robots. Baxter se programa moviéndole los brazos e indicándole lo que tiene que hacer, fácil, al alcance de todos y fácilmente modificable sobre la marcha.
- Extensible. Al igual que el PC original, Baxter ha sido creado con la intención de ser extensible con productos propios y de terceros para lo cual está previsto sacar un SDK (Software Development Kit) y ya están previstas diferentes "manos". Además Baxter está basado en Linux y ROS (Robot Operating System), ambos de código abierto.
- Simpático. Es simpático, con una pantalla LCD que muestra unos grandes ojos que responden a si entienden o no la programación.
- Inteligente. En el sentido de un robot, claro está. Tiene un quad-core corriendo Linux, 3 cámaras y un sonar que le permite tener conocimiento de dónde está y quién está alrededor. También tiene 2 brazos, imprescindibles porque se supone que va a trabajar, que pueden mover piezas de algo más de 2 kilos, con pinzas por manos.
La competición
La compañía danesa Universal Robots ha creado un brazo robótico con en general las mismas ideas y un precio de 20,000 euros. Es probablemente de toda la competencia la que más se le asemeja en cuanto a ideas.
Barrett Technology en Cambridge Massachusetts (al ladito de Rethink) produce brazos robóticos avanzados por unos 100,000 dólares.
Kawada Industries de Tokio produce robots industriales de entre 85,000 a 100,000 dólares.
Alumotion en Milán se especializa en procesos industriales para pequeñas y medianas empresas y fabricas brazos industriales.
Los humanos
La gran pregunta es la obvia, ¿a los humanos les gusta u odian a los robots como compañeros de trabajo?. Al principio parece que los odian porque temen que les quite el trabajo, pero sólo al principio, porque lo obvio es que el trabajo se lo va a quitar un trabajador en otro país con costes salariales menores a no ser que la empresa espabile y sobreviva. Muchas empresas que ya han empezado a instalar esta tecnología han tenido que aumentar turnos porque se han vuelto mucho más competitivos.
Además los robots hacen el trabajo monótono, el de mantenerte las herramientas, el de apretar el mismo tornillo de sol a sol y que algún otro, incluso un robot, lo haga se agradece. Además con la costumbre de humanizarlo todo, al poco tiempo el operario sin darse cuenta empieza a tratar al robot como su ayudante, quizás empezándole a tomar cariño.
http://www.nytimes.com/2013/12/04/technology/google-puts-money-on-robots-using-the-man-behind-android.html?hpw&rref=business&_r=0
ResponderEliminarEn el New York Times... sobre Google